Hace unos días quede con mis amigos, era uno de esos días en los que no tienes lugar a donde ir, así que comenzamos a pasear por el centro; pasamos al lado de un café, uno de esos sitios por los que sueles pasar pero que nunca has entrado sin saber muy bien porqué motivo. El caso es que decidimos entrar, y ¡menos mal que lo hicimos! Descubrimos un lugar agradable en el que pasar el rato charlando y tomando algo tranquilamente. El sitio en cuestión se llama "Cafe del Sur", y está en el Paseo Sagasta, número 37.
Cabe destacar el ambiente agradable que se respira; la decoración, enormes sillones, sillas muy cómodas; un servicio estupendo, y para los más golosos...¡unos batidos naturales deliciosos! Además todo el local está decorado con cuadros y fotografías, pequeñas exposiciones de arte que cada semana van cambiando.
Merece la pena visitar este lugar, no solo para pasar un agradable rato y probar los fantásticos batidos, sino porque a la vez puedes descubrir obras interesantes o no tan interesantes pero que seguro no te dejan indiferente.
Clara Royo
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